Apertura. Revista de innovación educativa‏

Disher Roseline

Resumen biográfico

Practicar de modo regular y constante algún tipo de actividad física es una práctica muy provechosa para la protección, evolución y rehabilitación del estado de salud, mejorando a la vez el carácter, la disciplina y la capacidad de decisión de nuestro día a día. Distintos estudios efectuados por expertos especialistas deportivos y por expertos en psicología concuerdan en que practicar deporte está entre las mejores terapias que existen, con el beneficio de que además son estrategias terapéuticas accesibles para todos. Hacer deporte conlleva abundantes beneficios para la salud de todos y cada uno de los que se deciden a practicarlo. Contamos una enorme cantidad de ejercicios que se pueden realizar y que no exigen en lo más mínimo unas destrezas o capacidades deportivas concretas, como pasear, subir escalones, nadar y pasear en bici, recordando en todo caso llevar cuidado y evitar esos instantes en que aprieta más el sol, como las horas pico en los meses de calor. Es esencial mantenernos hidratados de forma adecuada, amoldando en todo caso la intensidad y duración de la actividad a nuestras destrezas y acorde a la edad y condición física previa. En lo que se refiere a la periodicidad, la duración, la intensidad y la carga de cada rutina de entrenamiento, deben ser establecidas y adaptadas individualmente, en tanto que dependen absolutamente del plano técnico y de la condición física de la persona que vaya a realizarla.

SUGERENCIAS PARA DESARROLLAR LA CONDICIÓN FÍSICA