Apertura. Revista de innovación educativa‏

Sadie Edington

Resumen biográfico

Para ayudar a preservar seguros los productos alimentarios que se preparan, es esencial continuar unas pautas de higiene alimentaria. Las carnes crudas deberán mantenerse tapadas y separadas de los alimentos cocinados y de los alimentos listos para el consumo a fin de evitar la contaminación cruzada. Preste especial atención a los alimentos crudos y potencialmente peligrosos, y a los comestibles que puedan contener alérgenos. Use tablas de colores para recortar y equipos para preparar productos alimenticios peligrosos por separado. Guardar en la nevera aquellos productos que se adquieren, precortan o pelan para mantener la calidad y la seguridad. Marinar los productos alimenticios en el frigorífico. No volver a usar las marinadas que se emplean en alimentos crudos salvo que las lleve a ebullición primero. Divide las cantidades grandes de sobras en platos pequeños y poco profundos con tapas para que se puedan enfriar rápidamente en el refrigerador. Congela o cocina la carne molida cruda, aves o pescado como máximo en un periodo de 1-2 días, y la carne fresca como filetes o asados como máximo en un periodo de tres a cinco días. No descongeles los alimentos sencillamente sacándolos de la nevera. Debes colocarlos en el refrigerador o descongelar usando el microondas conforme con las instrucciones para ese comestible. Refrigere los ingredientes antes de prepararlos y devuélvalos al frigorífico si su trabajo se interrumpe o si necesita tomar un descanso. Coloque los paños y toallas empleados para la limpieza separados de los paños y toallas usados para manipular alimentos. Asegúrese de que la limpieza y la desinfección se efectúen con frecuencia. Las tablas para picar, los aparejos, las superficies y demás equipo van a deber limpiarse y desinficionarse antes de su empleo y cuando se cambie el tipo de comestible con el que se trabaja.

Evitar las enfermedades alimentarias, contacto con alimentos y calidad